Soy de la idea de que no vale la pena arrepentirse porque esas experiencias me han traído a donde estoy y a lo que soy. Me gusta mi versión.
Sin embargo, en los últimos años me he encontrado muy nostálgico ante esos momentos que disfruté de adolescente y joven adulto. Me da nostalgia porque sabía que la estaba pasando muy bien y sabía que eso iba a acabar.
Ahora mi vida es más tranquila, afortunadamente, pero a veces extraño esos días de desenfrene sin preocupaciones.
Si, me gusta mucho pensar de esa manera. Creo que la acumulación de experiencias nos convierte en personas únicas e irrepetibles.
Recordar el pasado con nostalgia es muy bonito, pero tambien es peligroso. Si lo haces mucho podés caer en el arrepentimiento. Pero el balance está en eso. Vivir el presente con gusto, y recordar el pasado con cariño, sin caer demasiado en uno u otro.
Fijate, Lucas, yo sólo me arrepiento de las cosas que no hice. De aquello que hice y me equivoqué, no me arrepiento porque aprendí muchísimo.
Creo que esas oportunidades que dejamos pasar porque como tú dices, no estamos siendo conscientes de lo que queremos en ese momento, se convierten en un interrogante al que no podremos responder nunca. Un tren que pasó y que ya no sabremos dónde nos hubiera llevado.
Si, llevaba semanas lamentando algunas decisiones que tomé en el pasado. En el fondo, lo que lamentaba más que nada era el no haber reconocido lo especial que fueron esos momentos. Pero como dices, uno debe arrepentirse de lo que no hizo, no de lo que hizo.
Soy de la idea de que no vale la pena arrepentirse porque esas experiencias me han traído a donde estoy y a lo que soy. Me gusta mi versión.
Sin embargo, en los últimos años me he encontrado muy nostálgico ante esos momentos que disfruté de adolescente y joven adulto. Me da nostalgia porque sabía que la estaba pasando muy bien y sabía que eso iba a acabar.
Ahora mi vida es más tranquila, afortunadamente, pero a veces extraño esos días de desenfrene sin preocupaciones.
Si, me gusta mucho pensar de esa manera. Creo que la acumulación de experiencias nos convierte en personas únicas e irrepetibles.
Recordar el pasado con nostalgia es muy bonito, pero tambien es peligroso. Si lo haces mucho podés caer en el arrepentimiento. Pero el balance está en eso. Vivir el presente con gusto, y recordar el pasado con cariño, sin caer demasiado en uno u otro.
Fijate, Lucas, yo sólo me arrepiento de las cosas que no hice. De aquello que hice y me equivoqué, no me arrepiento porque aprendí muchísimo.
Creo que esas oportunidades que dejamos pasar porque como tú dices, no estamos siendo conscientes de lo que queremos en ese momento, se convierten en un interrogante al que no podremos responder nunca. Un tren que pasó y que ya no sabremos dónde nos hubiera llevado.
Si, llevaba semanas lamentando algunas decisiones que tomé en el pasado. En el fondo, lo que lamentaba más que nada era el no haber reconocido lo especial que fueron esos momentos. Pero como dices, uno debe arrepentirse de lo que no hizo, no de lo que hizo.
Eres joven para arrepentirte...
Recuerda lo que decía Joan Manuel Serrat: "nunca es triste la verdad... lo que no tiene es remedio".
Gracias por tus palabras Ignacio! Un abrazo grande.